Ajoblanco, espeto, pitufo, sombra, nube,locas, biznaga, gazpachuelo...
Son palabras que los malagueños llevamos en el ADN y que, como no puede ser de otra manera, cada vez son más nacionales e internacionales porque todo el que pasa por esta tierra se enamora de ella. De su clima, su gente, su amabilidad, su jerga lingüística y por supuesto, de su maravillosa y amplia gastronomía.
Hoy os traigo todo un clásico, "El Campero". Se trata de un paz que data de los años 50 pero que se popularizó en los 80. Es un pan redondo, muy blandito y cuyo relleno básico es de queso, jamón cocido, tomate, lechuga y mayonesa, añadiéndole al gusto pechuga de pollo o lomo de cerdo. Una ve relleno se pasa por la plancha y se sirve cortado por la mitad para poder comerlo mejor. Es todo un icono de la gastronomía malagueña y aunque parezca una receta muy simple, es muy apreciada por todos los que la prueba. El pan le da un punto que ningún otro tipo de pan consigue y se convierte en un bocadillo totalmente diferente al resto, muy sabroso y contundente.
Creo que ya en varias ciudades de España, al menos me consta Madrid, hay locales que lo sirven porque es un éxito seguro. Pero os cuento un secreto... si compráis un campero en cualquier local de Málaga y vais a sentaros a la playa, en su arenita, por la noche, a coméroslo..eso no os lo dá otro lugar del mundo.
Pero como está pasando con todas las recetas tradicionales, se les está dando un vuelco ya sea en la presentación o en los propios ingredientes. Hoy os traigo un campero de gambas o langostinos que os puedo asegurar que se os va a caer las lágrimas de rico que está. Tenéis que probar el original "de toa la vida", pero después, tenéis que probar éste, no os dejará indiferente.
Sólo conozco un lugar en el que preparen camperos con ingredientes inusuales, El Ronqueo. Al ver su publicidad me dio la idea de prepararlo, nunca he estado, no sé como serán realmente los que ellos preparan, pero yo en seguida le doy al coco y lo preparo como sé que a mí me gustaría. Los tienen también de rosada frita, salmón plancha o atún. Todos ellos pienso hacerlos a mi manera, aunque este de gambas me ha entusiasmado, lo repetiré muuuuchas veces, y al próximo le añadiré un buen aguacate de la Axarquía fileteado.
Disfrutad....
Para un campero:
1 mollete para campero
1 docena de gambas (yo usé 8 langostinos)
1 tomate
lechuga
pimentón picante
aceite de oliva virgen extra
alioli
Lavamos y picamos lechuga, lavamos y cortamos a rodajas el tomate. Preparamos un alioli casero con un ajito pequeño o medio grande, que se note, pero no mucho-
Pelamos las gambas o langostinos y reservamos las cabezas y cáscaras.
En una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra pochamos bien las cáscaras y cabezas aplastándolas con un tenedor o paleta de cocina. Éste paso es opcional, pero os lo recomiendo porque aromatizará mucho el aceite.
Desechamos las cáscaras y cabezas y en ese mismo aceite introducimos las gambas o langostinos, añadimos un poco de pimentón dulce, como un cuarto de cucharadita y hacemos pr ambos lados hasta que la carne esté rosadita. No dejarla mucho rato para que no se seque.
Abrimos el mollete, colocamos una capa de cebolla picadita, las gambas o langostinos, el tomate en rodajas, otra capa de lechuga y una cantidad generosa de alioli. Si os ha quedado un poco de aceite de haber hecho las gambas, mojar con ella la otra parte del mollete y ponerlo encima de nuestros ingredient.
Pasar por la plancha, partir por la mitad y... ¡A gozar!
Recetas relacionadas:
Gazpachuelo de verano con aguacate, mango y gambas
Mermelada de cerveza Victoria malagueña
Ensalada de pimientos asados con boquerones
Arroz caldoso de los montes de Málaga
Cazuela de patatas con pintarroja y almejas
Ajobacalao, Ajoporro o Ajocolorao