Todavía hay personas que piensan que comer verduras es aburrido, que tiene poca "chicha" y eso es porque desconocen el apasionante mundo de estos alimentos.
Son diría yo, donde podemos encontrar más variedad de sabores, colores y, como no, formas de elaborarlas. Desde crudas a asadas, cocidas, a la plancha, al horno, en cremas en guarnición, como plato principal o como acompañamiento.
De cualquiera de sus maneras son un súper alimento que debemos de consumir diariamente.
A mí me gustan todas (menos las coles de bruselas, lo siento) y en casa comemos todos los días.
Por eso hoy he elegido esta receta de mi compañera Maite del blog Hierbas y especias, para mi segunda receta del Homenaje al blog, un rico gratinada con poco más de unas patatas y un poco de col que está riquísimo. Ideal para acompañar una carne o pescado o como plato único junto a una buena ensalada.
Maite usó además un poco de bacon ahumado (podría ser jamón), pero yo lo omití porque comía mi hija que es vegetariana.
También he pensado que la próxima vez que lo cocine le voy a añadir un par de huevos batido que opino que le tienen que ir fenomenal y a las verduras añadirle un poco de zanahoria.
Vamos al lío.
Disfrutad...
1/2 col
4/5 patatas
1/2 cebolla
2 dientes de ajo
caldo de verduras (o agua)
un chorreón de vino blanco
sal
pimienta
aceite de oliva virgen extra
queso rallado de vuestra elección
un poco de pan rallado
un poco de mantequilla
Pelamos las patatas en rodajas y las ponemos a cocer en el caldo de verduras hasta que estén casi listas, no del todo. Escurrimos y reservamos tanto las patatas como el caldo de cocción.
Picamos la cebolla y los ajos y empezamos a pocharlo con un poco de aceite de oliva virgen extra, pasados unos minutos introducimos la col troceada y dejamos unos cinco minutos.
Salpimentamos y vertemos el vino dejando que se evapore, seguidamente le ponemos un cacito del caldo de verduras d cocer las patatas, tapamos y dejamos hacer hasta que se reduzca el caldo y las verduras estén hechas.
En una fuente para horno colocar una capa de patatas, encima las verduras, cubrimos con queso rallado y tapamos con otra capa de patatas.
Añadimos un poco del caldo de las patatas para que no se seque demasiado en el horneado. Espolvoreamos con un poco de pan rallado y colocamos por toda la superficie pequeños puntos de mantequilla.
LLevamos al horno precalentado a 200º y dejamos hasta que veamos que la superficie esté doradita.
Servimos.
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