
Este blog lo comienzo con toda la ilusión de una aprendiz a cocinillas. Cada día que pasa me gusta más esto de estar entre fogones. Todas mis recetas son fáciles y económicas para que las pueda realizar todo el mundo. También tengo que decir que muchas son mías pero, otras muchas, son de mis amigos cocinillas a los que desde aquí les doy las gracias, porque me sería imposible darles las gracias uno por uno al subir sus platos que realizo con toda la ilusión. Gracias a todos.
sábado, 21 de noviembre de 2015
CHULETÓN DE TOMATE (ESTILO DE LA TASCA CELSO Y MANOLO)
Seguro que muchos os ha sorprendido leer chuletón... de tomate!!. Recordar que la cocina es un mundo libre y totalmente abierto a la imaginación y, lo mejor de todo, lleno de sabores, colores y aromas. Esta ensalada es su mejor exponente, toda una obra de arte en el plato, ideal como entrante en las fechas que se aproximan.
El chuletón de tomate es típico de "La Tasca de Celso y Manolo" de Huesca, allí usan el "tomate rosa" de la tierra, muy rico, pero yo la he preparado con productos únicos con Sabor a Málaga, y mi toque personal, por supuesto. El chuletón con unos maravillosos tomates Huevo de Toro del Guadalhorce, pepinos, aguacates, mangos de la Axarquía.
Tenemos todo un lujo de tierra para disfrutar de ella y comernosla a bocados!!!!
Qué poquito nos cuesta gozar en la mesa...
Disfrutad....
1 tomate hermoso (Huevo de Toro en mi caso)
1 pepino
1 cebolla roja
1 aguacate
1 mango
unos frutos secos (en la foto unas nueces pecanas, pero podéis utilizar pipas, nueces de california, avellanas...)
perejil
sal
limón o lima
aceite de oliva virgen extra
Lavamos bien el tomate y cortamos en rodajas gruesas, una por comensal, y picamos los "restos".
Colocamos una rodaja de tomate en cada plato y salamos.
Cortamos en rodajas el pepino, en trocitos el mango y el aguacate y en rodajas la cebolla roja.
Distribuimos sobre el chuletón de tomate.
Preparamos una vinagreta con perejil, unos frutos secos picados, aceite de oliva virgen extra, sal y limón o lima mezclándola bien.
Bañamos con la vinagreta la ensalada y servimos.
lunes, 9 de noviembre de 2015
REVUELTO DE BACALAO CON PATATAS PAJA (BACALAO À BRÀS)
Hacía tiempo que tenía ganas de cocinar esta receta. El bacalao es un producto que gusta mucho en casa y que admite infinidad de posibilidades, todas muy ricas.
Es curioso como ha "evolucionado" este pescado, a pasado de ser una "comida para pobres" muy socorrido en los tiempos de más estrechez en la que, además, no se le apreciaba mucho, era muy barato y muy mal considerado, a pasar a ser un producto estrella en cualquier recetario.
Además lo tenemos todo el año salado, en cualquier momento podemos hacer un platazo con el que triunfar.
Ésta forma de cocinarla es típicamente portuguesa (los mejores preparándolo), pero recuerdo perfectamente muchos platos que mi madre hacía con él y muy similares. No sé si porque tampoco estamos muy lejos de Portugal, o simplemente por el juego que dá.
El caso es que ella esta misma receta la preparaba pero con las patatas fritas normales, de toda la vida, y con todo el cariño que sólo una madre sabe dar...
Disfrutad....
1/2 kilo de bacalao salado
2-3 patatas
1-2 cebolletas según tamaño (esta vez usé un racimo entero pues eran muy delgadas)
2 dientes ajos
5 huevos
perejil
aceite de oliva virgen extra
aceitunas y/o jamón (opcional)
Desalamos durante 24 horas el bacalao en agua fría, cambiándola al menos tres veces.
Escurrimos y cortamos en trocitos que no tengan nada de piel ni espinas. Reservamos.
Hacemos nuestras patatas paja cortándolas primero en rodajas lo más finas posibles con mandolina o a cuchillo y después en tiras. Las freímos hasta que están crujientes. Reservamos escurridas sobre papel absorbente.
Cortamos el bacalao a trocitos con cuidado de no dejar nada de piel ni espinas. Reservamos.
Batimos los huevos (opcional ponerle una pizca de pimienta).
Empezamos pochando las cebolletas picadas finamente en una sartén amplia con aceite de oliva virgen extra.
Cuando empiece a tomar color le incorporamos los ajos picados, esperamos que esté todo bien pochadito, perro sin que se nos queme y añadimos los trozos de bacalao.
Sofreímos un poco, añadimos las patatas pajas y seguidamente los huevos batidos. Con una cuchara de madera vamos moviendo todo el conjunto con suavidad para que los huevos cuajen y todo quede bien integrado.
Servimos con un poco de perejil picado y, si os apetece, con unas aceitunas negras o una lonchita de jamón serano.
Un plato muy sencillo que os encantará.
Es curioso como ha "evolucionado" este pescado, a pasado de ser una "comida para pobres" muy socorrido en los tiempos de más estrechez en la que, además, no se le apreciaba mucho, era muy barato y muy mal considerado, a pasar a ser un producto estrella en cualquier recetario.
Además lo tenemos todo el año salado, en cualquier momento podemos hacer un platazo con el que triunfar.
Ésta forma de cocinarla es típicamente portuguesa (los mejores preparándolo), pero recuerdo perfectamente muchos platos que mi madre hacía con él y muy similares. No sé si porque tampoco estamos muy lejos de Portugal, o simplemente por el juego que dá.
El caso es que ella esta misma receta la preparaba pero con las patatas fritas normales, de toda la vida, y con todo el cariño que sólo una madre sabe dar...
Disfrutad....
1/2 kilo de bacalao salado
2-3 patatas
1-2 cebolletas según tamaño (esta vez usé un racimo entero pues eran muy delgadas)
2 dientes ajos
5 huevos
perejil
aceite de oliva virgen extra
aceitunas y/o jamón (opcional)
Desalamos durante 24 horas el bacalao en agua fría, cambiándola al menos tres veces.
Escurrimos y cortamos en trocitos que no tengan nada de piel ni espinas. Reservamos.
Hacemos nuestras patatas paja cortándolas primero en rodajas lo más finas posibles con mandolina o a cuchillo y después en tiras. Las freímos hasta que están crujientes. Reservamos escurridas sobre papel absorbente.
Cortamos el bacalao a trocitos con cuidado de no dejar nada de piel ni espinas. Reservamos.
Batimos los huevos (opcional ponerle una pizca de pimienta).
Empezamos pochando las cebolletas picadas finamente en una sartén amplia con aceite de oliva virgen extra.
Cuando empiece a tomar color le incorporamos los ajos picados, esperamos que esté todo bien pochadito, perro sin que se nos queme y añadimos los trozos de bacalao.
Sofreímos un poco, añadimos las patatas pajas y seguidamente los huevos batidos. Con una cuchara de madera vamos moviendo todo el conjunto con suavidad para que los huevos cuajen y todo quede bien integrado.
Servimos con un poco de perejil picado y, si os apetece, con unas aceitunas negras o una lonchita de jamón serano.
Un plato muy sencillo que os encantará.
lunes, 2 de noviembre de 2015
TRUFAS DE CASTAÑAS Y CHOCOLATE
Amarillos. ocres, marrones...los colores del otoño nos envuelven con su calidez, con sus paisajes espectaculares que pocos pintores son capaces de plasmar, la lluvia nos envuelve y no hay nada mejor que un buen sofá, un buen libro, la mantita y el café con unas trufas de una de las reinas de la estación: las castañas.
¿Qué aún no las habéis probado?, pues aquí os traigo la receta más fácil que podéis encontrar y con el mejor resultado, sólo tiene un problema, acabareis con pesadez de estómago... ¡no podréis comer sólo una!.
Málaga es una de las mayores productoras de castañas (más del 60% de Andalucía y más del 10% de toda España), sobre todo en El Valle del Genal, un precioso paraje en la comarca de Ronda, imprescindible visitar si pasáis por aquí, con unos paisajes de una belleza imbatible.
Así que hoy teneis una receta con mucho Sabor a Málaga, y con todo mi cariño.
Disfrutad....
1/2 kilo de castañas
150 gramos de chocolate fondant para postres
100 gr. azúcar
150 gr. nata para montar
60 gr. mantequilla
una pizca de sal
fideos de chocolate para rebozar
Hacemos un corte a las castañas y las pelamos. Escaldamos un par de minutos en agua caliente, sacamos, dejamos templar y pelamos de la piel interior.
Volvemos a colocar en agua hirviendo con una pizca de sal hasta que estén blanditas. Unos 20 minutos aproximadamente. Escurrimos y dejamos enfriar.
Calentamos el chocolate troceado junto a la nata, la mantequilla y el azúcar hasta que todo esté totalmente ligado.
En un bol amplio machacamos las castañas con un tenedor hasta que no queden grumos grandes, añadimos el chocolate integrado con el resto de los ingrediente y mezclamos completamente.
Guardamos en la nevera unas horas (yo los preparé por la noche y los deje hasta el día siguiente) para que coja cuerpo.
Con ayuda de una cucharilla vamos cogiendo porciones y haciendo bolas con las manos. A mí me salieron unas treinta de tamaño medio.
Echamos los fideos de chocolate en un plato y vamos rebozando las trufas en él.
La única "complicación" de esta receta es pelar las castañas que es un poco engorroso, si encontráis castañas ya peladas o hechas puré os servirán igual. De cualquier forma el resultado merece la pena.
Una idea genial para las meriendas otoñales o para regalar cuando vayamos de visita.
domingo, 18 de octubre de 2015
CROQUETAS DE FABADA
¡¡¡Ay madre qué ricas!!!
Cómo me gustan las croquetas, no me extraña nada que ya haya locales de restauración en los que sólo se sirva esta delicia.
Pensándolo bien, es genial porque nunca se les acabarán las ideas, se pueden hacer de todo y nunca les faltarán clientes porque... ¿a quién no le gustan las croquetas?.
Siempre han sido la solución ideal para una cocina de aprovechamiento, aunque es cierto que nuestras abuelas eran sota, caballo, rey... Croquetas del puchero, de jamón, de atún y poco más.
Afortunadamente eso ha cambiado y ya utilizamos cualquier ingrediente que tengamos en casa, ya sea dulce o salado y siempre nos salen riquísimas.
Las que os propongo hoy sorprenderán a muchos y gustarán a todos, son ideales para un picoteo informal, las tenemos congeladas y sólo tenemos que freírlas.
Podéis utilizar restos de la fabada que comisteis hace unos días o, si sois más perezosos, utilizar una lata ya preparada, en este caso os recomiendo Litoral, que es una de las más deliciosas que encontrareis en el mercado.
Disfrutad....
Un buen plato de fabada o una lata
mantequilla o aceite de oliva
una cucharada colmada de harina
leche
huevo
pan rallado
Escurrimos el caldo que pueda tener la fabada y lo reservamos. Separamos las fabes del compango, es decir, de sus "avíos" como decimos en mi tierra, el chorizo, la morcilla, la panceta..
En una sartén amplia echamos un poco de mantequilla o aceite de oliva virgen extra y tostamos ligeramente la harina, a continuación echamos las fabes que habremos aplastado un poco con un tenedor y el caldo que habiamos reservado, seguimos añadiendo poco a poco leche sin parar de remover hasta que conseguir una bechamel espesa para poder hacer bien las croquetas. Agregamos el compango muy troceado y ligamos bien.
Dejamos enfriar y guardamos unas horas, o de un día para otro, hacemos las croquetas y pasamos por harina, huevo y pan rallado.
Freimos y gozamos!!
(CUIDADO QUE SON ADICTIVAS Y YA SABEMOS TODOS QUE LA FABADA NO VA MUY BIEN CON LA LINEA).
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Croquetas de salmorejo
Croquetas de langostinos, coco y albahaca
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Croquetas de cabrales, manzana y cebolla caramelizada
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Siempre han sido la solución ideal para una cocina de aprovechamiento, aunque es cierto que nuestras abuelas eran sota, caballo, rey... Croquetas del puchero, de jamón, de atún y poco más.
Afortunadamente eso ha cambiado y ya utilizamos cualquier ingrediente que tengamos en casa, ya sea dulce o salado y siempre nos salen riquísimas.
Las que os propongo hoy sorprenderán a muchos y gustarán a todos, son ideales para un picoteo informal, las tenemos congeladas y sólo tenemos que freírlas.
Podéis utilizar restos de la fabada que comisteis hace unos días o, si sois más perezosos, utilizar una lata ya preparada, en este caso os recomiendo Litoral, que es una de las más deliciosas que encontrareis en el mercado.
Disfrutad....
Un buen plato de fabada o una lata
mantequilla o aceite de oliva
una cucharada colmada de harina
leche
huevo
pan rallado
Escurrimos el caldo que pueda tener la fabada y lo reservamos. Separamos las fabes del compango, es decir, de sus "avíos" como decimos en mi tierra, el chorizo, la morcilla, la panceta..
En una sartén amplia echamos un poco de mantequilla o aceite de oliva virgen extra y tostamos ligeramente la harina, a continuación echamos las fabes que habremos aplastado un poco con un tenedor y el caldo que habiamos reservado, seguimos añadiendo poco a poco leche sin parar de remover hasta que conseguir una bechamel espesa para poder hacer bien las croquetas. Agregamos el compango muy troceado y ligamos bien.
Dejamos enfriar y guardamos unas horas, o de un día para otro, hacemos las croquetas y pasamos por harina, huevo y pan rallado.
Freimos y gozamos!!
(CUIDADO QUE SON ADICTIVAS Y YA SABEMOS TODOS QUE LA FABADA NO VA MUY BIEN CON LA LINEA).
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viernes, 9 de octubre de 2015
CHIMICHANGA DE POLLO CON SALSA AGRIA Y GUACAMOLE
¿Qué os parece la receta que os presento hoy?
Un plato cien por cien mejicano para chuparse los dedos acompañado de una crema agria y un guacamole totalmente casero. Merece la pena elaborarlo con nuestras propias manos (y no comprarlo en un precocinado o así), que ya veréis la cara que os ponen en casa.
La comida mejicana se caracteriza por tener unos sabores muy contundentes, pero nada difícil de realizar. Es la comida ideal para tomar en un almuerzo o cena informal mientras que disfrutamos de buena compañía.
Con esta receta participo en el concurso de Cookpad de Cocina Mejicana en la que espero ganar!!!
Ya os contaré...
Disfrutad....
(Perdonad por no poneros una foto con el corte de la chimichanga)
4 tortitas de maiz (de las de hacer burritos)
1 pechuga de pollo hermosa o 2 pequeñas
1 bote de frijoles rojos ( de los que vienen enlatados y con un poco de tomate)
2 tomates
1 cebolla
2 ajos
1 pimiento grande o dos pequeños
sal
pimienta
aceite de oliva virgen extra
Para el guacamole:
1/2 cebolla o cebolleta
2 aguacates hermosos
1 tomate rojo
1 ramita de cilantro o una cucharadita de cilantro molido
1 cucharadita de tabasco verde (cuando no tengo uso el rojo)
un chorreoncito de aceite de oliva
zumo de 1/2 limón o lima
sal
Para la salsa de nata agria:
1 brick de nata
3 cucharaditas de zumo de limón
2 cucharaditas de vinagre
una pizca de sal
Para la ensalada mejicana:
lechuga
pepino
maiz
aguacate
tomate
cebolla
sal
aceite de oliva virgen extra
limón o vinagre
Empezamos por picar en cuadraditos la cebolla, tomates, pimiento y ajos y a pocharlo en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra.
Cuando haya tomado un poco de color añadimos el pollo a tiras o en cuadraditos (al gusto), también podéis pasarlo por la plancha aparte y después añadirlo al sofrito, aunque a mi me gusta que coja sabor todo junto.
Salpimentamos y cocinamos hasta que esté todo bien sofrito e integrado. Reservamos.
Calentamos un poco el bote de frijoles.
Pasamos por una sartén caliente las tortitas un minuto por cada lado.
Montamos las chimichangas colocando una cucharada de frijoles en el centro, cubrimos con el sofrito de verduras y pollo (en este momento podéis añadirle guacamole y salsa agria, pero a mi me gusta sólo por fuera),cerramos haciendo un paquetito.
Freímos nuestros paquetes en abundante aceite caliente y colocamos sobre papel absorbente.
Para la nata agria disponemos en un bol la nata y el limón y batimos con unas varillas, en cuanto veamos que empieza a cambiar de consistencia, añadimos el vinagre y la sal y seguimos batiendo hasta conseguir una crema de la textura aproximada de unas natillas o si nos gusta más, seguimos hasta que espese un poco más. Este proceso durará tres o cuatro minutos, no os preocupéis.
Para el guacamole simplemente batimos juntos todos los ingredientes.
Servimos las chimichangas con la nata y el guacamole al gusto y acompañamos con una ensalada tipicamente mejicana con los ingredientes que os he puesto arriba y aliñada con su vinagreta.
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martes, 29 de septiembre de 2015
PASTEL DE CALABAZA Y ALMEJAS (Y DE REGALO UNA RICA CREMA DE CALABAZA)
Hacía mucho tiempo que había visto esta receta de Karlos Arguiñano, pero a pesar de que me gustó, no terminaba de convencerme, pensaba que los ingredientes no casaban muy bien entre ellos y no me decidía a elaborarla, aunque la tenía ahí guardada en la sección de mi cerebro de "recetas que tengo que hacer"..
Hace unos días mi querida amiga Natalia me regaló unas fantásticas calabazas que eran una obra de arte por sí solas, me apenaba incluso meterles el cuchillo de lo bonitas que eran, cuál elemento de el mejor bodegón de un gran artista (me ha quedado algo cursi, pero es que eran así).
Preparé una maravillosa crema de calabaza, os pongo la foto y la receta al final, hoy es dos por una, y como aún me quedaba otra, pensé: "ésta es la mía" y decidí cocinar esta tarta.
¡Qué buena elección!, está riquísima, con un sabor muy delicado, y una combinación maravillosa.
No es nada difícil de realizar, y que no os pase como a mí que no lo tengáis claro, decidiros, que os aseguro que valdrá la pena..
Disfrutad...
1 lámina de hojaldre (en la receta original es masa quebrada)
800 gr. de calabaza ya pelada y cortada a cuadraditos
300 gr. de almejas
1 cebolla
2 dientes de ajo
una pizca de jengibre en polvo (podéis rallar un poco del fresco)
3 huevos
3 cucharadas de harina
1/2 litro de leche aproximadamente
aceite de oliva virgen extra
perejil picado
1/4 de vaso de vino blanco
sal
pimienta
Poner la calabaza en una bandeja de horno, espolvorear el jengibre y cubrirlo con un hilo de aceite de oliva virgen extra.
Meter a horno precalentado a 180º unos 20/30 minutos, comprobar que ya está blandita.
Extender la masa de hojaldre sobre el molde que vayamos a utilizar, preferiblemente desmoldable. Cubrirla con el mismo papel en la que viene envuelta.
Cubrir con garbanzos para evitar que suba mucho la masa y meter también en el horno el mismo tiempo aproximadamente que la calabaza, sólo tenemos que ir comprobando que empiece a tomar un color ligeramente tostado. Podéis realizar este paso metiendo las dos preparaciones a la vez o por separado, como os sea más cómodo.
Mientras tanto hacemos la bechamel con las almejas.
Introducir las almejas en abundante agua salada unos minutos, sacarlas del agua sin removerlas para que la arenilla quede en el fondo.
Echar un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra en una sartén, echar los ajos picaditos y antes de que empiecen a tomar color añadir las almejas, el perejil y el vino, poner una tapa y dejar hasta que se abran. Escurrir guardando el líquido y separar la carne de las valvas.
En una sartén empezar a pochar la cebolla muy picadita, cuando empiece a coger color agregarle la carne de las almejas y la harina, tostar ligeramente para que se le vaya el sabor a crudo y añadirle el caldo de las almejas junto con el ajo y perejil para que tenga más sabor. No dejar de remover mientras que vamos incorporando la leche, sal y un poco de pimienta hasta que consigamos una bechamel un poco espesa. Reservamos.
Batimos la calabaza junto a los huevos y un poco de sal.
Empezamos a montar nuestro pastel.
Quitamos el papel y los garbanzos de la masa de hojaldre y vertemos la bechamel, esparciéndola bien.
A continuación añadimos con cuidado la masa de calabaza y huevo y volvemos a meter en el horno a 180º unos 15 minutos.
Sacamos, esperamos a que temple y servimos, aunque a mí me gusta mucho más completamente fría.
Y como lo prometido es deuda, de rebote una Crema de calabaza para chuparse los dedos que parece que el verano ya se está yendo...
Pochamos una cebolla o un puerro, lo que más os guste en un poco de aceite de oliva virgen extram le añadimos un par de zanahorias troceadas y una patata también troceada junto con medio kilo de calabaza a trozos, salpimentamos, añadimos 1/2 litro de agua aproximadamente y cocemos hasta que todo esté blandito, añadimos un brick pequeño de nata en el último momento y batimos bien.
Acompañamos con pan frito y un hilo de aceite de oliva.
Rica y muy reconfortante!!
¿Os habéis fijado que no os miento con lo bonita que es la calabaza?Recetas relacionadas:
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sábado, 26 de septiembre de 2015
PATATITAS AL CHORIZO ENVUELTAS EN BACON
La receta que os traigo hoy es de la que, seguro, le va a gustar a vuestros hijos. Te harán la ola cuando sirvas la mesa y no te costará nada darles el capricho. El único inconveniente es que os la pedirán muy seguido, ya veréis...
Si os queda por ahí un chorizo que ya se os está quedando muy seco, es ideal para esta receta, si no es así os indico en la receta como secarlo y desgrasarlo un poco.
Podeis variar la receta elaborándola sustituyendo la patatita cocida por puré de patatas que podéis aliñar o rellenar con lo que más os guste, quitarle el bacon que lo envuelve o acompañarla con vuestra salsa preferida.
Sólo tenéis que echarle imaginación a la cosa, cocinad y...
Disfrutad!!!
1 paquete de patatas pequeñas especial microondas (o directamente las naturales que venden en las fruterías)
1 chorizo
pan rallado
1 sobre de bacon en lonchas
1 o 2 huevos
sal
pimienta
aceite de oliva virgen extra
Para acompañar:
rebanadas de pan tostado
ensalada
Metemos las patatitas en el microondas con su bolsa y todo tal y como nos indica el fabricante, solo que la tendremos un par de minutos menos de tiempo.
Si las patatas que usáis son de las que se compran al peso, cocerlas en abundante agua o en el microondas hasta que estén casi hechas.
Esperar que se enfríen y quitarles la piel. Reservar
Si el chorizo no está seco,dadle un par de pinchazos para que no explote y envolvedlo en varias servilletas de papel y meterlo en el microondas a máxima potencia uno o dos minutos. Sacar con cuidado de no quemaros, esperar que temple, desenvolverlo y secarlo un poco con otra servilleta. ésto nos servirá para que no esté tan blandito. Quitadle la piel y rallarlo junto con el pan rallado en vuestro robot de cocina, batidora o thermomix. Os debe de quedar totalmente integrado con el pan.
Batir el huevo y salpimentad ligeramente, pasar por el las patatiras, seguidamente pasadlas por la mezcla del pan y el chorizo rallado.
Cuando las tengáis todas, quitad el borde a las lonchas del bacon y envolver las patatas con ellas, sujetad con un palillo.
Colocar en una bandeja y metedla al horno precalentado a 180º unos minutos, hasta que veáis que el bacon está doradito. (Subid un poco la temperatura en el último momento).
Quitad los palillos y servir sobre una rebanada de pan tostado y una ensalada.
Para los que no esteis a dieta ni os preocupe el peso...
mojad en mayonesa o ali.oli, de escándalo!!
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